MANUEL SAHAGÚN
"Trato de conmover, de hacer pensar a la gente"
Cuando un artista usa su experiencia como aprendizaje, sin dudas lo que va a obtener es una carrera consistente. Un ejemplo de esto podría ser Manuel Sahagún, tan dj como productor, supo en poco más de una década de recorrido, tocar en cabinas de buena parte del mundo además de editar para respetados sellos, siempre cercano al sonido house. Su más que interesante visión sobre la música y la escena, se refleja en esta entrevista que los invitamos a leer.
-¿En qué momento te sentís como artista?
Llevo más de 13 años trabajando como dj, productor y músico, y siempre el contexto nacional e internacional me llevaron por distintos rumbos. Es difícil determinar donde estoy parado hoy, porque es una cosa que se está moviendo constantemente. Toda la vida fui dj y productor de house, pasando por distintas ramas según iba sintiendo las cosas y creo haberme dado el lujo de siempre poner y componer la música que tenía ganas. Nunca fui de subirme a los vagones de moda.
No sé en qué momento uno empieza a hacer arte y a ser artista. Personalmente me siento desde hace un tiempo, en un momento creativo y positivo musical, donde hay una búsqueda continua de una identidad sonora. Pero como músico, considero que mi trabajo puede tener compromiso cultural y social. Para mí no solo se trata de entretener y empujar hacia adelante a la escena, sino de llegar a la gente, de conmoverla, de hacerla pensar o si es posible, hasta ayudarlas a tener una vida mejor. No sé si me sale algo de eso o si eso me convierte en artista.
-¿Subirse al vagón de lo que está moda es un "atajo" al éxito?
Si llamamos éxito a la consagración comercial del artista, el mejor "atajo" actual es el de los vínculos sociales. Subirse a un vagón no garantiza nada, de hecho, yo siempre hice lo posible por esquivarlos, pero cada vez es más difícil. Con la globalización algunas cosas se vuelven más homogéneas y de repente te das cuenta que hay diez mil personas haciendo lo mismo que vos. También hay talentosos que por subirse al vagón equivocado no exploran a fondo su capacidad. Lo más sano sigue siendo ser auténtico, hacer lo que uno sienta y no cuestionarse tanto las cosas.
-¿Crees que esa búsqueda de la identidad sonora es lo que te lleva mantenerte activo en la creación artística?
Es que si estuviese haciendo siempre lo mismo me aburriría. Imagínate que cada vez que voy a tocar, llevo un playlist casi totalmente distinto! Y en el estudio es parecido, cada ciertos releases que saco se puede ver que hago un gradual cambio en el tipo de composición o el uso de drums, sintes, samples o texturas. Me siento versátil y veloz en el estudio y eso me permite desarrollar rápido ideas y avanzar varios proyectos. Creo que soy bastante autocrítico con mi trabajo y eso también me hace estar siempre buscando nuevos rumbos.
-¿Cuál es tu relación con el estudio actualmente?
Hace un par de años estaba haciendo colaboraciones y remixes para algunos sellos fuertes y eran tracks con un tinte más "pop". Esos lanzamientos me ayudaron a ganar un montón de exposición en el mercado europeo pero con el tiempo resultó que no me sentía 100% cómodo a la hora de pincharlos. Necesitaba hacer un reset en la cabeza para reorganizar la dirección musical en el estudio y decidí por unos meses enfocarme solo en el trabajo como dj. Durante ese tiempo hice un par de giras que me resultaron muy positivas y eso me dio el envión para retomar el proceso creativo.
Desde entonces paso casi todo el día súper nerd en el estudio, escuchando discos, tocando el piano, leyendo, investigando, explorando sonidos, técnicas, métodos de composición y producción. Hice una barbaridad de música nueva, volví a mis raíces underground y terminé varios EPs para editar en vinilo y digital. Van a estar saliendo por Tooman Records, GCR, Petite Mort Musique y Oblack Label, entre otros.
También gradualmente fui cambiando mi metodología de trabajo y ahora en mis proyectos utilizo sintetizadores externos, samples de vinilos, composición en tiempo real, dejando presente los errores e imperfecciones. Me gusta la idea de dejar un loop sonando, empezar a improvisar con los sintes y grabar lo que salga, sin MIDI clock, sin automatizaciones ni eventos programados, así una vez que el audio está grabado, no hay vuelta atrás. Antes componía todo en el secuenciador con mil pistas, canales y procesamiento, y me perdía con tantos detalles. Ahora que libré a la computadora de varias tareas, el resultado es mucho más simple, humano, natural, librado de algunas fórmulas obvias y por sobre todas las cosas, espontáneo.
-Hablas de una etapa en la producción con la que un tiempo después no te sentiste cómodo ¿Lo consideras un hecho lógico en el camino de aprendizaje como artista?
Totalmente, pero eso se nota en algunos artistas más que en otros. Mis primeras producciones son claramente más primitivas que las actuales, pero hay otros casos en los que el artista tiene un catálogo impecable desde sus inicios. Hay músicos que tienen capacidad de autocrítica y pueden ir mejorando su obra, los otros son los cracks.
-Si tenés que graficarnos en palabras como fue el camino que recorriste en lo sonoro desde los inicios de tu carrera hasta la actualidad ¿Cómo sería?
Siempre fui housero. Mi primer disco fue claramente tech-house y salió hace 10 años en Wiggle Recordings. Después me fui volcando al sonido norteamericano que tenía mucho más funk, soul y disco. Ahí, estuve mucho tiempo editando jackin-house y downtempo en varios sellos y me abrió las puertas a la primeras giras internacionales en una época que no teníamos redes sociales para difundir nuestro trabajo. Con Jay West siempre fuimos amigos y en un momento surgió la idea de hacer cosas juntos, potenciando los conocimientos de cada uno. El resultado fue un sonido más nu-disco, aquellas colaboraciones terminaron siendo lanzamientos con un impacto comercial mayor.
Desde hace unos años estoy trabajando mayoritariamente en deep house pero me dejo influenciar un poco más que antes por el techno. Como dj es el lugar donde me he sentido más cómodo, donde tengo mayor lugar para expresarme, ser creativo y sentirme auténtico.
-En todos estos años editaste en muchos sellos de distinta importancia y diferentes partes del mundo ¿Hoy cuál crees que es la mejor forma de dar a conocer tu música con los labels?
Depende del sello. Algunos salen a cazar talentos, otros no aceptan demos, otros aceptan pero bajo ciertas condiciones y algunos directamente no hay forma de contactarlos. Para cada caso habría que tomar una estrategia distinta, pero para todos hay que dar en el clavo con la música que uno está enviando. También depende de cómo valores tu música. Hay que ser autocrítico y preguntarse ¿Mi trabajo está a la altura de las circunstancias? Además, hay que saber hacer una lectura y entender la dirección que toma el sello y si el trabajo de uno entra en ese camino. Luego lo de siempre: un Soundcloud, buen timing, saber inglés y mucha suerte!
-¿Cuál es tu análisis sobre la escena nacional?
Es un panorama complejo de analizar. Como ocurre en la escena mundial, la veo llena de cosas buenas y de cosas malas, solo que acá el mercado es más pequeño y acotado creando un marco de competitividad fuerte. Hay muchos artistas que están haciendo cosas excelentes con buena repercusión, editando vinilos y viajando por el mundo, me parece genial que la Argentina tenga cada vez más representantes en el exterior. También hay un montón de talentos escondidos por distintos rincones del país, que se merecen un mejor lugar en la escena.
Pero aún estamos un poco atrapados en este sistema donde hay que traer a un dj internacional medianamente conocido para captar público (gratis hasta las 2 por lista de un RRPP amigo) y que la fiesta sea un negocio rentable. Me encantaría que tengamos una escena fuerte en consumo interno, donde se valore al artista local y el público pueda pagar entrada y esté metido en el trabajo del dj. Obviamente hay factores económicos que influyen negativamente, pero el sistema sigue siendo democrático, la gente es la que elige qué música consumir y ahí es donde se define parte de la escena que tenemos.
Hay que trabajar mucho y en equipo para transformar esas cuestiones culturales y en ese sentido me alegra ver nichos nuevos que vienen surgiendo hace unos años. Tanto en Buenos Aires como en el interior del país, que están apostando a mejores producciones con mayor calidad artística, captando y formando un público más exigente, algunos en locaciones alternativas al circuito clásico pero donde se crean, para mí, las mejores experiencias. Esperemos que esta tendencia crezca.
Así como el público y los promotores, nosotros los djs/productores tenemos que ser más exigentes con nosotros mismos y preguntarnos todo el tiempo por qué hacemos lo que hacemos, qué es lo que nos moviliza. Tenemos djs nacionales que no solo nos llegan con su trabajo sino con sus palabras y sus ideas. Esa gente es la que suma.
Por el contrario, hay djs con aires de artista que construyen una falsa imagen en la internet, más preocupados por subir una foto en un aeropuerto, que por compartir un mix o con más horas de lobby que buscando nueva música para tocar. Esa gente no construye escena, la banaliza.
-Conoces mucho la escena nacional pero también giraste mucho por USA y Europa ¿Qué dos o tres puntos claves crees que necesita nuestra escena para hacerse más fuerte, principalmente en lo que decís del consumo interno?
Es tramposo compararse con otros países. No me parece que USA esté mejor que la Argentina hoy por hoy y todo lo que pueda opinar sobre Europa ya fue dicho por los últimos entrevistados en Buenos Aliens.
En general, trato de ser positivo porque veo varios ciclos que perduran en el tiempo con djs nacionales y siempre hay gente nueva tratando de hacer cosas. En términos generales vamos despacito pero estamos avanzando. A veces faltan locaciones, otras se superponen eventos con djs internacionales un mismo día y siempre hay riesgos e incertidumbre cuando vas a hacer una fiesta, entre otros problemas. Se necesita un escenario de estabilidad económica por muchos años para tener una sociedad que pueda disfrutar más su tiempo libre y aprender e interiorizarse a desarrollar sus gustos personales. Hoy en día vivimos a full y consumimos lo que nos llega más fácil. Abrís el celular y BOOM! Descubriste a Avicii!
-¿Cuáles son los últimos artistas (electrónicos o no) que te partieron la cabeza?
Me la paso escuchando cosas viejas y nuevas, revolviendo viejos discos y descubriendo nuevos artistas en Soundcloud, así que me cuesta darte una respuesta concreta. Me estaría olvidando de mucha gente, pero últimamente disfruto bastante el trabajo de algunos artistas nacionales como: Middlemannn, Unfinished Portraits, Andrés Zacco, Federico Molinari y Whoann, entre otros.
-¿Planes para los próximos meses en cuanto a lanzamientos y presentaciones?
Tengo algunos discos que van a estar saliendo a partir de este mes en Tooman Recordings, Oblack Label, Petite Mort Musique, Rest! Music, Good Company Recordings y más. En simultáneo, estoy trabjando en un nuevo proyecto del cual no quiero adelantar mucho aún y con ganas de armar un álbum. También estoy haciendo unos laburos de ingeniería en mi estudio para otros artistas pero no sé si contar eso como lanzamiento.
Como dj, estoy con la gente de Sol Solar en Argentina, siempre girando por el país y apareciendo en varios ciclos en Buenos Aires. En el mes de noviembre haré una gira por USA con presentaciones en Nueva York, Boston, San Francisco y más. Al que me pida que le traiga algo, le llevo de regalo una foto del juez Griesa.
Enlaces:
facebook.com/djmanuelsahagun
Entrevista: Damián Levensohn
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