KRAFTWERK EN ESTONIA
3-D bajo cero

Buenos Aliens tuvo el honor de vivir parte  de la nueva gira del legendario grupo Kraftwerk, más precisamente en su show en Estonia. Con casi 30 conciertos anunciados este año, es la gira más intensa por Europa que presenta el cuarteto en mucho tiempo.

La actualidad los encuentra habiendo ganado un Grammy a mejor álbum Dance/Electrónica por 3D: The Catalogue, compitiendo con Bonobo, Mura Masa, Odesza y Sylvan Esso. Fue la primera vez que ganaron este premio, a pesar de haberles sido otorgado el Lifetime Achievement Award en 2014 y contar con dos nominaciones anteriores, en el '81 y en el 2005.

Empezando por 4 fechas en febrero en Albertinum, un museo de arte moderno en Dresden, cubriendo gran parte del Norte de Europa, para luego ir dirigiéndose hacia el centro y culminar en agosto en un antiguo anfiteatro en el festival Dimensions, en Croacia. Nada mal considerando que ya llevan 48 años de actividad y que todos sus miembros son, al menos, sexagenarios.

La formación actual solo cuenta con uno de sus fundadores, se trata de Ralf Hütter, quien ya vivió 71 primaveras. Florian Schneider, el otro protagonista del dúo que marcara la música del SXX, se presentó por última vez con Kraftwerk en 2008, y su última gira mundial con ellos fue la de Minimim-Maximum, en 2004. Al cuarteto lo completan Fritz Hilpert, quien se uniera en 1989, dejando su marca en los discos The Mix, Expo 2000 y Tour De France. Henning Schmitz, quien se sumó a tocar en vivo en el '91,pero ya había trabajado en estudio con ellos dede mucho antes, inclusive figurando en los créditos del disco Electric Café. Y Falk Grieffenhagen, técnico de video desde 2013.

El show en Tallin se llevó a cabo el sábado 17 de febrero en el Saku-suurhall, el estadio cubierto más grande que tiene Estonia, ambiente más que propicio para sumergirse en la experiencia planteada por los germanos. Es la primera vez que presentan su show 3D en esta región, su concierto anterior en el país fue en 2004. Comenzó pasadas las siete de la tarde, finalizado el ingreso de la numerosa afluencia, y una vez que todos contaban con sus lentes 3D, que también se convirtieron en souvenir. Vale destacar el marketing de las inscripciones del nombre de la banda a un lado, y el catálogo 1-2-3-4-5-6-7-8, los ocho discos de estudio reconocidos por ellos mismos, a pesar que tienen más cosas en su haber, sobre todo considerando su inicio más relacionado con el krautrock (sí, batería y percusiones varias, flautas, teclados, Schneider haciéndose el loco son solos de sintetizadores cargados al hombro, etc.).

Su show retrofuturista no tuvo mayores diferencias en la lista de temas con respecto a su última presentación en Buenos Aires (tristemente célebre por haber estado cerca de cancelarse gracias a los genios que hacen como que gobiernan). Durante las más de dos horas de concierto pasaron por (casi) todos sus hits, con los puntos más altos en The Man Machine, Trans Europe Express, Autobahn o Tour De France.

Si uno se pone quisquilloso, en comparación a giras anteriores, por ejemplo la que los llevó al Estadio Obras en 2004, sí hubo cambios. Ya no suena Pocket Calculator, en ninguna de sus dos versiones, ni tampoco varios cortes de Tour De France. Han tenido una orientación quizá un poco más electro, o trance, incluyendo tracks de Electric Café, y algunos otros de The Man Machine que no habían tocado antes, como Spacelab, con una puesta en escena Kubrickiana donde la nave espacial aterriza en Estonia, al igual que dos años atrás aterrizara en el Luna Park.

¿Qué si tocan en vivo? A pesar de ir reduciendo su estudio móvil Kling Klang siguiendo los avances tecnológicos disponibles, aún lo siguen haciendo. Es cierto, ya no tienen laptops Vaio como en su gira de 2004, y tampoco los vamos a ver usando una calculadora como hicieron en el 98. Pero sin embargo, en las tarimas en las que presentan su show minimalista, cuentan con diversos equipos, tales como un Apple-Ipad, Sony Vaio Tap 20, un Keysonic KSK-6001, un Maschine de Native Instruments, controladores Numark, controladores MIDI Ribbon Controller, controladores Steinberg CMC, etcétera.

Para agregar otra diferencia a su show en el Luna Park, y un toque de humor a la eterna pregunta de si tocan en vivo o no, esta vez sí usaron sus famosos robots para presentar We Are The Robots, uno de los momentos más ovacionados de la noche.
Una de las frases de este tema es "We are charging our battery, now we are full of energy", y vaya que siguen estando cargados. Solo queda esperar el tan esperado noveno álbum, noticia que nunca negaron en las pocas entrevistas que dieron.

Texto: Guillermo Cimadevilla