EL ASESINATO DE LEANDRO GATTI
Tristeza en la escena electrónica

El pasado domingo llegó a los medios de comunicación nacionales una tristísima noticia relacionada con un DJ. Leandro Gatti, sonidista y musicalizador con amplio recorrido en la escena de Mar del Plata, había sido asesinado en ocasión de robo cuando salía de trabajar en Mr Jones.

La inseguridad en nuestro país es un tema tan amplio y difícil de abarcar, que jamás desde Buenos Aliens pretenderíamos esbozar algún tipo de opinión al respecto. Sin embargo, nos parece importante repasar este trágico hecho que pone en evidencia, una vez más, la precariedad a la que están expuestos los trabajadores de la música y la industria del entretenimiento en Argentina.

Leandro -también conocido como Lele- además de DJ, era desde hace más de una década, uno de los sonidistas habituales en los principales clubs y eventos de la ciudad. Un personaje entrañable que no tardaba en demostrar su profesionalismo y buena predisposición para con sus colegas. Situación fácil de comprobar, viendo el afecto demostrado en las publicaciones realizadas en las últimas horas por artistas de todo el país vía redes sociales.

La noche de sábado en el bar Mr Jones, de la zona de Playa Grande, había terminado a las 4 de la madrugada. Luego de haber desarmado el sonido -a las 6- Leandro se acercó a su auto junto a algunos amigos, estaba estacionado en la zona costera cercana a los clubs nocturnos. En ese momento, fueron abordados por motochorros que luego de robarle una notebook y una tablet, efectuaron un disparo que tuvo un conocido y doloroso desenlace.

Amigos y referentes de la escena marplatense están convocando para este miércoles a una marcha en pedido de justicia. Será a las 17hs en H. Yrigoyen y Avenida Luro.

Hace ya algún tiempo venimos hablando desde Buenos Aliens sobre lo necesaria que es una organización inmediata por parte de djs y musicalizadores. El foco lo hemos puesto sobre la precariedad contractual, económica y de derechos en general, a las que el rubro se enfrenta por estos lados. Hoy, se suma a este análisis un punto más, ya que no vivimos en un país en el que sea lógico que un trabajador se mueva con equipos costosos en una zona virtualmente liberada de seguridad privada y policial.

Además de sumarnos al pedido de justicia por Lele, creemos fundamental que, a partir de este hecho, quienes contraten a un DJ, sonidista, artista visual, etc, se haga cargo de la seguridad del mismo -no solo en el gig - sino también en las inmediaciones del espacio.