ALE CASTRO
"La música tiene que salir de adentro tuyo"

Ale Castro es un personaje bastante particular que navega la escena electrónica hace ya varios años. Ciudadano del mundo, reparte su residencia entre Mendoza, Berlin y San Petersburgo, lugares en los que desarrolla sus diferentes proyectos, tanto en la producción como en el vivo. En una extensa pero divertida charla, los invitamos a conocer a un artista que se hizo a los golpes y afters, encontrándose actualmente en el que probablemente sea el mejor momento de su carrera.

-¿Qué nos podes contar sobre tu sello, Love & Loops Records?

Love & Loops es mi más reciente proyecto, un label en formato vinilo gestado con la idea de resolver una problemática que se me viene presentando hace un par de años: no encontrar sellos para editar mi música y obviamente por el amor al formato, el cual colecciono desde el año 98. Es "muy underground", sos "muy cheesy" o " is too housy for us", fueron algunas de las respuestas ante mis demos que me hicieron replantearme si mi música era una mierda o yo estaba haciendo algo mal.

Caí en la triste realidad de que hace bastante tiempo que no hay un punto medio de calidad en los sellos, es todo muy extremista. O tal vez yo me quedé en la vieja escuela de sellos que desaparecieron o que hoy por hoy editan música horrible, que está a la moda para estar en el top 10 de algún mercado digital, dejando de lado la calidad musical que los hizo populares en el pasado y asi perdieron la identidad.

Cada vez son menos los sellos donde me gustaría que se editara mi música y como siempre fui de la idea de que las cosas salen mejor cuando las hace uno mismo, decidí armar este sello. En el cual voy a estar trabajando con amigos y colegas a los que respeto muchísimo y que siempre han ocupado un lugar en mi bag. Al mismo tiempo quiero abrir una puerta a toda la nueva generación de productores de todo el mundo que están haciendo música buenísima y que encajan a la perfección en mi propia interpretación del House, con influencias Disco, Garage, Deep, Funky, etc. Que es básicamente lo que quiero editar en el label.

El primer vinilo es un Various Artists con tracks de Manuel Sahagún, Bs As Deep, Franco Strato y uno mío. El segundo disco no lo he cerrado del todo aun, pero en la lista están Gus Arancibia de San Luis, Gruuv de Carlos Paz, y tengo algunos internacionales en mente. El 3 es mi número favorito, motivo por el cual el lanzamiento deja de lado los compilados para centrarse en un EP de mi autoría en conjunto con el legendario Robert Owens y uno de mis hermanos de la vida Stephanos, con el que compartimos varios proyectos y producimos juntos hace muchísimos años. El cuarto disco es un especial de deep house, para el ya están confirmados Miguel Puente, otro track de Manuel Sahagún que me encanta y seguramente como en todos los discos voy a meter algún track, edit, remix o colaboración. Un clásico tributo al gordito de la pelota que siempre quiere jugar.

-¿Cómo surgió el proyecto que te tiene colaborando con un referente del house como Robert Owens?

Es una historia divertidísima de un sueño hecho realidad, tengo que admitir de antemano que soy MUY colgado a veces. Lo suficiente como para estar hablando varias horas con Robert hasta darme cuenta que era Robert Owens. Fue en Berlín, en Sisyphos, donde estoy casi siempre que tengo un rato libre durante el fin de semana ya que es mi club favorito en la ciudad. Ahí el conde Sauchelli nos presenta como "Ale y Robert" y automáticamente nos pusimos a charlar de todo un poco, de música, festivales, alimentación, etc. Tras un largo rato me di cuenta que su inglés no tenia para nada el típico acento alemán, que es común encontrarse en Berlín (aunque al ser una ciudad multi-culti siempre puede sorprenderte con visitas de cualquier parte del globo). Ahí caí en la hermosa realidad de estar hablando con una persona que es una gran influencia para la música house, para mi y para el mundo entero.

Robert es un genio, es una enciclopedia de sabiduría y una persona súper humilde que lleva a todas partes su mensaje de amor y respeto a través de la música. Luego de compartir varias salidas juntos y muchas horas más de charlas y anécdotas, le conté sobre mi proyecto, la ideología del sello, y le encantó. Nos llevó un tiempo coordinar la grabación, ya que en verano ambos estábamos ocupados tocando y viajando, pero la idea de hacer música juntos siempre estuvo vigente. Estuve trabajando en algunas pistas y finalmente en enero de este año, Robert fue al estudio de Moog Conspiracy en Berlín a grabar algunas letras y pensamientos que fueron surgiendo para las canciones. Cabe destacar que en Berlín hacían -5 grados y estaba nevando, pero nada de eso detuvo al mensajero del amor en la misión de expresar y compartir su mágico arte frente al micrófono.

El resultado me dejó sin palabras, me emocioné muchísimo al borde de las lagrimas, me hizo darme cuenta que cuando menos te lo esperas podes terminar haciendo lo que amas con otras personas que aman igual que vos, personas que básicamente son los creadores de esta música que a mi me impulsó a elegir esta profesión y estilo de vida. Me dio la pauta de que todo puede ser posible, tanto en los sueños como en la vida real. El disco lo vamos a sacar por mi sello, en formato vinilo, pero por el momento no tengo mas detalles para contar ya que todavía estoy en el proceso de producción, para el cual decidí tomarme todo el tiempo que sea necesario para hacer lo mejor posible.

-Si tenés que resumir tu discografía en 3 tracks para alguien que nunca te escuchó ¿Cuáles serían?

2009 - What Is This (English Lesson) [Franz Franz,DE] 

2013 - Stieglitz [Savor Music,AR] 

2016 - Stackenschneider EP [Myhouse Yourhouse]

-¿Cómo es tu proceso creativo a la hora de trabajar en el estudio?

Luego de casi 10 años produciendo en muchas plataformas y espacios de trabajo, hoy puedo decir que encontré el equilibrio perfecto entre comodidad y practicidad. En Mendoza tengo algunos sintetizadores, cajas de ritmos, una mesa analógica con varios canales, un MPX8, una SP-909, controladores Midi y una computadora con Ableton y FL Studio. En esa pequeña jungla de cables se desarrolla mi actividad como productor.

Normalmente, durante la semana estoy en el estudio trabajando todo el tiempo que sea posible, hay días en que las ideas salen solas y súper espontaneas, y hay días en los que doy vueltas horas y horas sobre un mismo loop sin avanzar mucho. Pero por lo general soy bastante libre a la hora de crear. Anteriormente intenté crear una serie de pasos a seguir para organizarme y no tuve mucho éxito, asique prefiero que todo fluya. Un día grabo un bajo buenísimo y tal vez de eso nace una canción, a veces me pongo a jammear con todas las maquinas y salen lindos resultados. También a veces me olvido de apretar REC! Pero luego, por lo general cuando la canción está un poco mas armada, la comparto en privado con colegas para tener sus opiniones, consejos, tips. En algunas ocasiones suelo testearlos en mis gigs para ver que tan mal suena (soy pésimo mezclando por lo general haha!) y también ver la reacción en el público.

Luego de ese proceso de testeos, me doy cuenta si el track tiene futuro o no, hago el mixdown, mastering y empiezo a difundirlo. Si el track no pasa los testeos, por lo general uso todos los sonidos diseñados para futuras creaciones.

Todo esto hablando de cuando estoy en Mendoza. Cuando estoy de viaje tengo un setup más liviano que cabe en una mochila, con el cual puedo desarrollar bocetos e ideas para darles un mejor desarrollo en el estudio. Hace un tiempo me compré una grabadora Tascam, que me sirve para hacer anotaciones y grabar sonidos en general. Al mismo tiempo compartimos un pequeño pero poderoso estudio en Berlín junto a mis compañeros de piso, donde paso 5 o 6 meses cada año. Pero ahí los tiempos son compartidos y el ritmo de trabajo es otro.

-¿Cómo ves la escena al menos en los lugares que frecuentas como Mendoza y alrededores?

La escena en Mendoza es linda y rara al mismo tiempo, tenés semanas que hay de todo simultáneamente y tenés semanas que no hay absolutamente NADA. Si bien la cantidad de gente que asiste a las fiestas y la magnitud de las mismas creció a la par, no veo una evolución en la escena, si no más bien una masificación, en la cual los beneficiados son siempre los mismos. No existe la cultura de club en la ciudad o mejor dicho se perdió, no tenés algo estable que esté funcionando todo el año y todos los fines de semana, si no mas bien un sector X de algún mega-boliche que solo abre cuando no hay ningún evento masivo que le haga competencia.

Entiendo perfectamente que más allá del amor o la cultura musical también hay un negocio por parte de los dueños de estos multi-espacios. Obviamente a nadie le gusta perder tiempo y dinero, pero si los clubes vieran su pérdida como una inversión y apostaran a crear una identidad y darle forma a un producto que sirva en un futuro, en vez de adoptar esa postura oportunista seguramente le darían una 2da opción al publico cuando hay un evento grande en la ciudad.

Particularmente en mi caso, la mayoría de los djs que vienen a tocar a Mendoza no son de mi agrado musical y muchas veces termino saliendo por inercia o porque mis amigos me insisten, pero salgo con mala predisposición y cuando vuelvo a casa desearía no haber salido y haberme quedado haciendo música, mirando netflix o cualquier cosa mas productiva que ir a escuchar a un dj que no me gusta, con la esperanza de que me sorprenda. Ojo, no me mal interpreten: me encantan las fiestas grandes y los festivales, sobre todo cuando hay algo interesante en el line up, pero la verdad es que solo veo como le exprimen el bolsillo a la gente de una manera descarada.

Otra cosa triste de Mendoza, es que los artistas locales no tienen el protagonismo que se merecen. Y no lo digo por mí porque yo vengo de otra época, en la que te contrataban para hacer warm up a X artista que venia de afuera y listo. En la actualidad la mayoría de los djs locales de la nueva generación tocan súper temprano haciendo de teloneros de algún warm up traído de otra provincia, con un volumen bajísimo, casi a oscuras, para poca gente. Con condiciones laborales lamentables y en una escena donde hay mucha oferta y poca demanda, los eventos grandes son la posibilidad para muchos artistas que están empezando para mostrar su música ante una gran cantidad de público que por lo general no asiste a otros eventos que no sean masivos.

Por otro lado, soy consciente de los arreglos que tienen las agencias y bookers que siempre tratan de armarte el paquete con la excusa de que el artista principal exigió a otro artista y bla bla bla. Todos conocemos las reglas del juego, pero estaría buenísimo que los organizadores de eventos en Mendoza defendieran y bancaran un poco más a los artistas de su provincia ya que son ellos los que bancan y defienden la escena todo el año, y son ellos mismos los que construyeron los pilares para que hoy en día se puedan hacer estos eventos gigantes, las excepciones son contadas.

Yo llegué a Mendoza en el 2003 o 2004, no recuerdo bien, y en esa época tenias la Osa Club que abría todos los findes, también había fiestas de Drum & Bass por si querías escuchar algo diferente, había magazines on-line como Tualegria, foros de discusión (y puterio haha), programas de radio, sellos independientes, etc. Había una escena que se venia generando hace años, a la cual ninguna mega-productora aportó nada que sea significativo como para decir que la escena "creció" o "evolucionó". 

Para mí, la escena evoluciona cuando el publico empieza a entender y apreciar la calidad de lo que está escuchando y empieza a elegir lo que le gusta y lo que no le gusta, en vez de seguir a la manada por inercia a la fiesta de turno de cada semana porque no hay otra alternativa y después estar criticando en foros o Facebook.

Igual tampoco es todo un bajón, no quiero pecar de pesimista, de vez en cuando hay visitas interesantes, y también hay muchos artistas mendocinos haciendo cosas importantes. Hay grandes exponentes como Alejandro Mosso, Fauna o RLHBSLCN, que nos representan por el mundo. Hay muchos eventos no tan grandes bastante divertidos y más cuidados en lo musical, fiestas clandestinas que me agradan bastante y también una generación de jóvenes que están produciendo música súper interesante en vez de ser solamente "djs". Creo que es solo cuestión de tiempo para que todos ocupen el lugar que les corresponde y el publico empiece a valorar y respetar a sus artistas locales, ojala sea asi.

Todo esto lo digo desde mi punto de vista por fuera de la escena, hace 5 años que no toco regularmente en Mendoza como lo hacia antes, ya que reparto mi tiempo entre Europa y Rusia. Últimamente vengo ocasionalmente a pinchar de vez en cuando acá y regularmente toco afuera, se invirtió un poco el asunto pero aun asi siempre tiene su sabor especial tocar en Mendoza todos los años y ver como van pasando las generaciones en las pistas de baile, tener a tus amigos ahí disfrutando junto con vos, estar cerca de tu familia, saber que vas a dormir en tu propia cama. Esas pequeñas cosas que no tienen precio y que muchas veces no valoramos lo suficiente.

Si bien yo nací en Córdoba, Mendoza es la ciudad donde se desarrolló una gran parte de mi carrera y en la que me tocó vivir, por eso siempre seguiré poniendo mi granito de arena en lo que está a mi alcance para colaborar al crecimiento de la cultura musical electrónica en la zona de Cuyo. Eso incluye también a San Juan y San Luis, dos provincias donde la escena esta súper fresca y se están generando cosas interesantes, está buenísimo también poder formar parte de eso.

-Buena parte del año la pasás en Berlin.

Berlín es uno de los mejores lugares en el planeta para que un artista pueda desarrollarse y crecer. Tenés muchísimas disquerías, acceso a cualquier hardware que quieras comprar, muchísimos clubes con line ups súper diversos entre artistas consagrados y desconocidos, o mejor dicho aun "no tan conocidos". También, el estilo de fiesta salvaje non-stop es una buena forma de perderse en esa "burbuja rave", para encontrarse a uno mismo, tal vez siendo esto algo indispensable para cualquier artista. En mi opinión, sincerarse, matar ese ego interno que todos en algún punto tenemos y ver para donde realmente queremos apuntar, me parece más importante que saber usar un software a la perfección, usar hardware o VST, vinilos o digital y todo ese snobismo que hay en la actualidad. La música tiene que salir de adentro tuyo.

A diferencia de Argentina, en Berlín si producís y tocas buena música, es solo cuestión de tiempo para que te conozcan en el ambiente y te den un espacio. No tenés que ser amigo del dueño o el rrpp de turno, no tenés que bookear a ningún dj para que te devuelvan un minúsculo favor, no tenés que asegurar que vas a llenar el lugar y todas esas boludeces a las cuales todos estuvimos alguna vez sometidos a la hora de tocar o realizar un evento.

Tampoco es todo color de rosa. La escena está un poco inundada del turismo que no aprecia una mierda y solo van a Berlín a pegársela un finde y ver si pueden entrar al Berghain. Cuando la realidad es que les importa un carajo lo que pasa ahí adentro, solo quieren probar su suerte y decir "yo pude entrar" o peor, "a mi me rebotaron". Y como ese puedo darte muchos ejemplos mas de gente que pareciera no estar captando la onda o lo que realmente está pasando.

Por otro lado, también se ha vuelto un punto súper turístico para los argentinos que parecieran haber descubierto el tesoro escondido (aunque un poco tarde ya) y se olvidan que Deró vino acá en el 98. Se confunde el tour europeo con poner fotos en Instagram de sus vacaciones por Europa, mucho after y poca rave.

-Me gustaría un poco de detalle sobre cómo fue ese momento en que "te encontraste a vos mismo".

No fue particularmente un momento en concreto sino la suma de todos. Siempre sostuve que se aprende de las malas experiencias y que las buenas solo se disfrutan y se guardan en la memoria. Viajar te expone todo el tiempo a eso, y si viajas solo hay mucho tiempo para reflexionar. Viví en una burbuja muchísimos años de mi vida, me crie en la montaña, un día vendí una gran parte de mi estudio y junto a unos ahorros que tenía emprendí viaje hacia Europa. Tuve la suerte de viajar por primera vez con mi amigo Nicolás, que me enseñó muchos trucos de supervivencia que más de una vez me salvaron la vida.

El primer año fui bastante bien preparado económicamente, era la primera vez y flashie con todo, las disquerías se quedaron con gran parte de mis ahorros como era de esperarse, y ahí fue cuando tuvimos la agradable idea de cambiar el vuelo de Munich a Bs As, por uno que iba al DF y de ahí bajar hasta Mendoza. Sin un sope, muy hippie, la dudamos muchísimas veces, pero nos dimos cuenta que si no era ahí, no lo íbamos a hacer más. Vi gente apuñalarse a escasos metros de donde yo estaba sentado comiendo en Colombia, en la aduana de Chile me quisieron quitar mis discos, estuve 3 días y medio en un bus camino a Perú con gente de una misión religiosa que me hablaba de dios y me cantaban el cumpleaños, me dio la venganza de Moctezuma en México y casi muero deshidratado. Pero me hacía feliz tener una historia divertida para contar y fechas en los lugares que visitamos.

Durante mucho tiempo sostuve esa propia ideología: plata y miedo nunca tuve, pero tarde o temprano necesitas entrar en el sistema del dinero. No hay nada más feo en el mundo que estar en una disquería y no poder comprarte nada o ver como alguien se lleva el disco que vos querías enfrente tuyo. Y con respecto al miedo, la vida me demostró muchas veces que evidentemente si tenía, pero también me enseñó a aceptar que es normal y superarlo es gratificante.

Igual creo que más allá de todos los viajes internos y externos de mi ser, la experiencia más traumática que me hizo replantearme toda la vida fue al volver de un festival que duraba 7 días (obviamente estuve presente los 7 días). Estábamos súper homeless, la poca gente que conocíamos en Berlín aún estaba en el festival o no teníamos la confianza suficiente como para pedir que nos dieran hospedaje. Si te pones a caminar encontras de todo en la calle, televisores, heladeras, libros, cds, y por supuesto: colchones. Así, fue como termine durmiendo en una plaza en el 1er mundo, nos confiamos en el couchsurfing, nos confiamos en los amigos que no eran los correctos, y en ese momento no nos quedaba otra que confiar en nosotros mismos. Dormí súper cómodo y tranquilo, no lo voy a negar, pero al otro día cuando me desperté y me dio el bajón post festival 7 días, quebré.

Me senté en un banco de la plaza y estuve llorando un rato largo, mi cabeza no podía entender que estaba pasando, había viajado súper hippie y relajado pensando que me iba a comer el mundo y recibí un cachetazo cultural gigante y al mismo tiempo que lloraba empecé a darme cuenta todas las cosas que hacía un rato largo venía haciendo mal. No estaba produciendo, estaba saliendo mucho, estaba desactualizado, un poco missing children para ser honesto. Pero también vi las cosas buenas que estaba haciendo, hasta donde había llegado, y eso me hizo valorarme y entender un poco que carajo quería para mi vida y como lograrlo. No tenía sentido colgar la toalla tan pronto, empecé a mirar para atrás y me acordé como habían sido mis inicios, todo lo que tuve que remarla para ocupar el lugar que yo quería y me di cuenta que ahí en Berlín tenía que hacer lo mismo. Tal vez hubiese sido diferente si me hubiese puesto las pilas antes, que se yo.

Ahí me di cuenta que el camino no iba a ser fácil, pero sabía que si me ponía las pilas lo iba a lograr. Al rato todo se normalizó, conseguimos un lugar para dormir un par de días, se confirmaron algunos gigs, todo volvía a la normalidad, pero me había dejado una enseñanza. Luego de ese día acepté mi rol en esta vida y empecé a dedicarle la valoración, el tiempo y el amor que se merecía.

-Musicalmente también sos muy inquieto, así que contame sobre tus otros akas y sellos.

Más allá de todo lo que conté de mi aka Ale Castro, tuve una época en la que empecé a jugar con lo tropical y lo electrónico. De ahí salieron 2 proyectos: Freak Castro y The Pobretons, también un sello llamado Wakale Records, donde sacamos muchas producciones que tuvieron mucha repercusión a nivel mundial. Es muy gracioso a veces recordar las cosas que pasaban, con The Pobretons hicimos un remix que salió para Subatomic, un label que tiene en su catalogo artistas como Lee Scratch Perry, David Lynch o Elephant Man, entre otros. Con Wakale Records editamos un montón de EPs y compilados, donde tuvimos colaboraciones con artistas de todas partes del mundo, algunos como Pablo Lescano y otros como Diplo en su blog Mad Decent.

El feedback siempre fue bueno, pero perdió interés de mi parte rápidamente, ya que el genero se bastardeo demasiado rápido y acá en Argentina pareciera que la gente no puede entender que un ser humano puede tener múltiples proyectos. Siempre me daban con un caño y me molestaba un poco laburar con esa energía negativa dando vueltas, asique por lo general estos proyectos los suelo retomar en grandes festivales o eventos del otro lado, en un formato más dub y más cuidado en el aspecto tropical, mas avocado a lo electrónico pero con elementos orgánicos que representan a Sudamérica.

Con el tiempo aprendí a darle el respeto que se merece a la música latina. Igual me hago cargo de que hice muchísimos mash ups re cheesys, pero todos se divertían y eso estaba bien! También hicimos muchas locuras más que siempre me traen divertidos recuerdos y me dan ganas de retomar el sello, porque quedaron muchas cosas colgadas sin editar que tal vez estaría bueno que vean la luz algún día. Pero no encuentro tiempo y suficientes ganas aún.

Luego está Slow Disko, proyecto que nació en Fusion Festival, el festival que cambió mi vida literalmente. En el 2012 fui por primera vez invitado por mi hermano de la vida Nicolás Behler aka RLHBSLCN, y vivimos una experiencia única que nos llevó a toparnos con artistas súper interesantes como Voodoohop o Sutsche, que pinchaban vinilos de 45rpm en 33rpm, logrando un efecto muy subsónico por describirlo de algún modo, con bpms bajos que me tuvieron hipnotizado como 5 horas. Apenas volví a casa me puse a escuchar toda mi colección y a separar los que quedaban bien en 33, porque no todos quedan bien. Ahora hay una nueva moda del Slo Mo, donde todos pitchean tracks para abajo, pero muchas veces suenan como el culo, sobre todo si tienen voces. La gracia de hacerlo con vinilos, es encontrar esas piezas que naturalmente suenan bien asi, hard to find, pero es más divertido.

Nico siempre estuvo en plan Live y yo siempre estuve mas en plan Dj, tocamos juntos en muchísimos clubes y festivales del mundo junto a artistas como Chancha Vía Circuito, Awesome Tapes From África, Voodoohop, Noema y Acid Pauli por nombrar algunos. Al tiempo incorporamos a Blacky Dahbar, del dúo Soda Tanz, él aporta las voces sexys con delay y percusiones a nuestro hibrido entre dj set y live, el resultado es muy divertido y tenés a toda la gente hipnotizada bailando a unos bpms súper suaves, diversión mental y baile soft. Además las performances que hacemos van acompañadas de atuendos raros, mucha psicodelia y diversión, la última vez que tocamos en Katerblau, llevamos un tigre gigante y lo pusimos en el dj booth y cuando tocamos para la apertura del club hace unos años atrás yo había caído disfrazado de empleado de Mc Donalds, aunque no recuerdo bien porqué.

En la actualidad Nico está más avocado a su proyecto solista que es una bomba, y a veces nos cruzamos por Alemania y tocamos juntos, lo mismo con Blacky que también tiene otros proyectos en paralelo. Pero eso es lo bueno de Slow Disko, que tal vez uno puede estar o no, pero siempre estamos presentes, aunque siempre es más divertido cuando tocamos los 3 juntos, ojala este verano coincidamos nuevamente.

Klangweilig es el nombre del sello de Slow Disko, donde vamos a editar música de artistas como Arutani, PCP, Doqta, y obviamente nuestras propias producciones. Vamos a distribuirlo vía Bandcamp, para que sea un trato más honesto entre los artistas y el mercado, además el nombre es una ironía porque en alemán Klang significa sonido y Langweilig significa aburrido, asique hice un mash up entre 2 palabras y quedó Klangweilig que seria algo asi como "sonido aburrido" pero la palabra en realidad no existe en el lenguaje. Muchos no lo entienden, muchos creen que auto-titularse de aburrido es negativo y a muchos no les causó gracia, pero a mi me encanta molestar en otros idiomas.

Otro de los trabajos en conjunto que más disfruto es con Stephanos, otro hermano de la vida, con el cual tenemos 2 proyectos: Rhythm & Substance, que es nuestro costado mas melódico y emocional, donde la mayoría de la programación es analógica, lo cual lo hace muy divertido!

Con el mismo setup nos convertimos en Castro & Farah, que es nuestro lado mas groovero, fundamentalistas del house y sus variantes. Con ambos proyectos ya editamos en varios sellos, estuvimos en algunos tops de Beatport, nos remixaron artistas como Ryan Dupree, Vanilla Ace y también hicimos muchos gigs por varios países. En la actualidad estamos laburando un nuevo Live para salir a tocar por Sudamérica y Europa, asique estoy súper motivado con los resultados que van saliendo en cada sesión, es como tener tu propia banda con solo un amigo sin tener que organizarte y bancarte al resto de los músicos, para eso está hecho el hardware.

 También estoy largando de manera súper hippie e independiente una serie de Tools de mi autoría a través de Bandcamp que van a ser publicados cada 1 o 2 meses. Además vamos a hacer una versión digital de Love & Loops con un catalogo totalmente diferente del que va a salir en vinilo, pero esto en un futuro un poco más lejano.

Y para terminar, estuve haciendo colaboraciones con Martinko! de Mendoza, Nils Twachtmann de Berlín, Nacho Bolognani de Carlos Paz, Gruuv de la misma ciudad y con Yanee a quien aprovecho para pedirle disculpas públicamente por colgarme tanto! También estoy haciendo algunas cosas más techno que no se con que nombre sacarlas, y hace poco largué una serie de mixes de Ambient llamados The Beat Less.

El que mucho abarca poco aprieta, es totalmente cierto, por eso algunos proyectos los llevo mas relajadamente que a otros y algunos tienen mayor tiempo de dedicación. Porque si no me volvería loco, priorizar y organizarme fue algo que me costó varios años para aprender, pero el regalo más preciado es vivir de la música.

Enlaces:
 facebook.com/alecastromusic
 facebook.com/loveandloops

Entrevista: Damián Levensohn