HERR
Combinando música y management en Barcelona

Herr es un nombre establecido en Europa pero no tan conocido en Argentina. Es que este artista y productor de eventos, a pesar de haber nacido y vivido buena parte de su vida por estos lados, inició su carrera en Barcelona. Nos encontramos en una amplia charla donde profundizamos sobre FACT, su fiesta que se posicionó como una de las principales del continente, su experiencia en el estudio y las cabinas, y varios temas más que invitamos a leer.

-Para los que no están al tanto ¿Hace cuánto residís en Barcelona y cómo es que decidiste ir para allá?

Este 2016 cumplo 15 años viviendo en Barcelona. Me fui de Buenos Aires a los 23, en el año 2001; después de un primer viaje que tuvo lugar en 1999 que había emprendido por curiosidad, pero con intenciones de quedarme. Tras seis meses haciendo base en Madrid y conociendo el resto de España, regresé a la Argentina y al poco tiempo la situación del país se estaba tornando un poco áspera. Yo trabajaba en una empresa alemana en San Justo y a raíz de eso me enteré de que se venía una devaluación.

Tomé la decisión de venirme definitivamente justo antes del corralito. Vendí un ordenador y un par de altavoces que por aquel entonces fueron mis primeros pasitos en la producción musical, reuní unos pocos ahorros y empecé de cero en Barcelona.

-¿Qué nos podés contar sobre tu serie de eventos FACT?

En 2010 cuando yo era dj residente y director artístico de Macarena Club y Macarena Beach, un chico me presentó la marca FACT, con la que había hecho alguna fiesta en Ibiza y Barcelona, pero que no tenía nada que ver con el reconocido magazine inglés; y lo incorporé como contenido en mis programaciones. Empezamos a invitar artistas de renombre internacional y poco a poco nos fuimos consolidando como alternativa en Barcelona.

Un socio inversor nos propuso sumarse al proyecto y eso nos dio la consistencia que nos faltaba. Al poco tiempo teníamos residencias en Londres, Sidney y Berlín. Y al cabo de cinco años, con muchísimo trabajo, habíamos hecho fiestas en más de 30 países, llegando a casi 200 eventos en un año para un total de 200.000 personas bajo el lema "We don' t follow trends, We believe in good music and good artists".

FACT se transformó en un movimiento, en una marca global alternativa y con mucha proyección, donde los residentes hemos sido y somos columna vertebral del proyecto.

-Se viene una nueva semana Sónar con su respectivo Off ¿Qué tienen planeado para este año?

Yo personalmente llevo 10 años participando activamente en eventos Off Sonar y he visto crecer este movimiento contracultural desde sus inicios hasta la actualidad donde ahora llegan a la ciudad unas 400.000 personas; muchísimas más que las que el mismo Sónar alberga.  

Con FACT llegamos a hacer 45 fiestas en 5 días en 2014 y desde 2015 hemos decido reducir la cantidad para aumentar la calidad. Este año haremos la 5ta edición de las ya clásicas FACT Music Pool Series, la semana completa de Pacha Barcelona e incorporamos la edición de LOVELAND Barcelona, un festival clásico holandés con 20 años de trayectoria. Todas las propuestas tienen unos lineups impresionantes.

-Estás en contacto constante con los principales artistas internacionales ¿Quiénes son los que nunca viste fallar en una cabina y los que más te sorprendieron últimamente?

Uff, la lista de los que nunca vi fallar es bastante larga... Artistas de diferentes estilos, en diferentes formatos, sea live, vinilo, o cd. Son muchos los que siempre cumplen. Mencionar algunos que he visto fallar quizás sea más breve, pero no viene al caso. Prefiero destacar los que me han sorprendido últimamente.

Sin duda destaco a la dupla que Raresh y Praslea hacen como Praslesh cuando tocan juntos; esos pibes tienen una música de otro planeta. Imprimen una intensidad tremenda a sus sets con tracks imposibles y ponen la pista del revés. Valentino Kanzyani es otro imprescindible que siempre da cátedra. A Sven Väth lo tuvimos hace poco y el hombre demostró que está en muy buena forma. Ben Klock es otro que derrocha clase. Y hace poco tuve la oportunidad de ver a Vilod live, el dúo de Ricardo Villalobos con Max Loderbauer... Cerré los ojos cuando empezaron y los abrí cuando terminaron... Fue un viaje astral, ja.

-Tenés una agitada agenda de lanzamientos este año ¿Cuáles son algunos de los próximos releases?

2016 es un año de cambio para mi en este sentido. En febrero salió a la luz un V/A de SERIALISM Records donde incluyo un track mío, Atalaya. Ahora en Mayo sale otro V/A de YAKAZI que incluye otro track, Optoma. Además hay dos EPs de 3 tracks cada uno en camino, uno para Infuse y otro para Heisenberg. Y otro EP de 4 tracks para un label americano que no puedo desvelar aún. Tantos años dedicado a esta industria priorizando la dirección de los proyectos no me habían permitido centrarme en el estudio como ahora. Estoy muy contento con los resultados que están saliendo y el feedback que estoy recibiendo de mi música es muy positivo.

-¿Dentro de qué sonido e influencias podrías enmarcar tu sonido a la hora de producir?

A pesar de que a la hora de poner música suelo tocar más fuerte; en el estudio tiendo a trabajar ritmos más cercanos al house, introduciendo sonoridades más propias del techno y buscando líneas de bajos musculosas. La mayoría de los tracks que saldrán este año tienen alguna similitud en la utilización de los synthes, con los que intento envolver el groove y crear cierta profundidad en los backgrounds. Creo que el constante desafío de todo artista es precisamente esa búsqueda de un sonido propio, y el enmarcarse demasiado con etiquetas suena a estereotipo, pero en mi opinión limita las posibilidades a la hora de explorar. En cuanto a influencias, son los artistas que me sorprenden los que me nutren de nuevas ideas e inspiración. 

-Acaban de estrenar Contrast Agency ¿De qué se trata este proyecto?

Es una agencia de gestión de proyectos vinculados estrictamente a la música electrónica, es agencia de bookings, es agencia de management de diferentes showcases, es agencia de diseño, agente de prensa, es la evolución natural del resultado de tantos años dedicados a este sector. FACT nos sirvió para abrirnos camino pero se nos ha quedado pequeño y tomamos el siguiente paso. Debíamos respetar su esencia de marca de fiestas y eventos especiales, y dejar de utilizarla como agencia. Por eso era evidente tener que ir más allá incluyéndola dentro de los productos de Contrast Agency.

-Dividís tu tiempo entre lo administrativo/organizativo y lo artístico ¿Crees que termina yendo una cosa de la mano de la otra, al menos en tu caso?

En mi caso van de la mano desde el primer día. Yo empecé poniendo discos en la playa de Barcelona hace muchos años y organizando mis propias fiestas; eso fue lo que hice sin parar durante los últimos diez años. Hasta el punto que me encuentro con una agencia propia que representa artistas y hace management de showcases, marcas, labels y festivales a nivel mundial. Pero lo más importante es la música, si no hubiera sabido compaginarlo y estar a la altura de las circunstancias con mi música, todo esto nunca hubiera pasado. Me siento vivo involucrado en mil proyectos a la vez. Y creo que hay un punto en que la intervención de un buen management, una agencia de bookings o un agente de prensa, es fundamental. Yo en mi caso me monté mi propio chiringuito porque el camino me fue llevando, fue una evolución natural.

-Cada tanto volvés y te presentás en diferentes partes del país ¿Cómo encontrás la escena nacional en esas visitas?

En este sentido volver a mi país tiene siempre una connotación extraordinaria, especialmente para una persona como yo que no curtió la escena local como artista local. En un punto me siento como Walter de la publicidad de Telefónica (también de los 90, ouch) que regresa a su casa 15 años más tarde y no registra el paso del tiempo...

Mis recuerdos cercanos como clubber se remiten a las raves del Parque Sarmiento, a la Creamfields de San Isidro, a La Cigale, La Ideal, el K2, Ave Porco, el Pacha de finales de los 90, al Club 69 cerca del Obelisco, al Odeon...

No tengo un punto de partida para poder hacer un juicio de valor sobre la evolución. Pero mis experiencias siempre han sido muy buenas cuando voy a tocar, y desde fuera percibo un constante crecimiento tanto en cuanto a clubs, eventos y festivales como a talentos locales. Hay muchos argentinos dando vueltas por Europa que son excelentes djs y productores. Y otra cosa que nunca dejará de sorprenderme es la energía del público. He tocado en muchos países en los últimos años y lo que se ve acá no se ve en muchos otros lugares. La entrega en el dancefloor es total.

-El año pasado se realizó en Buenos Aires una edición del Sónar con pésimo resultado de producción y organizativo ¿Estás al tanto de lo que pasó? ¿Crees que es imposible trasladar una marca europea de ese tipo fielmente a Latinoamérica?

Desconozco el tema en profundidad, pero no creo que sea imposible, es una cuestión de la correcta elección del partner adecuado y de logística. A veces las distancias no permiten a las marcas europeas poder trasladarse con todo un equipo humano propio, que al final son los que hacen que las cosas se hagan mejor o peor, viéndose obligados a ceder la gestión a un promotor local que quizás no entienda los standards de producción de la misma manera. Lo triste es que marcas que llevan tantos años trabajando por una identidad se vean afectadas por malas gestiones de terceros, pero como decía un amigo, al mejor panadero se le quema el pan... Aquí en Europa ocurre menos porque estamos todos muy cerca y la logística no resulta un obstáculo.

Enlaces:
 facebook.com/HERR.fact
 facebook.com/factmusicpool
 www.contrast-agency.com

Entrevista: Damián Levensohn