CORONAVIRUS
La electrónica en tiempos de pandemia

A causa del Covid-19 la situación mundial es absolutamente incierta, pero hay un par de cosas claras en lo que respecta al presente y futuro cercano de la escena electrónica -y todos sus trabajadores-: por varios meses la actividad tal y como la conocíamos, no existirá. En ese contexto, iniciamos una serie de notas en las que hablaremos con diferentes actores esenciales, en carácter informativo y ante todo constructivo.

Andres Schteingart, es conocido artísticamente como El Remolón, pero también es médico psiquiatra, por lo cual nos pareció el indicado para conocer cómo afecta mentalmente lo que sucede, en particular, al artista.

-En primera instancia y hablando de la sociedad en general ¿Qué genera psicológicamente en los individuos enfrentarse a una pandemia a nivel global como la que se está viviendo? ¿Y la cuarentena?

Lo que genera es miedo, frustración, enojo, sorpresa, sensaciones y emociones varias. Es notorio como ciertos rasgos de la personalidad se exacerban. El obsesivo limpia el doble de lo que limpiaba, el hipocondriaco se persigue más con estar enfermo y el ansioso lo es aún más. Lo que sí, en general despierta son estados de ansiedad, como una preparación frente a una amenaza desconocida, que puede afectar la calidad de vida, la integridad física o el confort que uno mantenía.

Con la cuarentena aparece cierta desorganización, hoy jodía diciendo que todos nos acostamos, almorzamos y nos levantamos 1 o 2 horas más tarde. No poder continuar con la propia rutina rompe con nuestra estructura y sensación de control. Es notorio el aburrimiento producto del aislamiento en algunas personas, se quejan de no saber qué hacer, de sentirse vacíos. También expresan sentimientos de tristeza, soledad y encierro. Creo que, por un lado, lo importante es poder reconocer la transitoriedad de esta situación. En muchos casos aparece esa necesidad superadora de aceptar que hay que renovarse y acudir a otros recursos para sobrevivir (streamings?) e intentar hacer todo eso que no podías hacer antes por la falta de tiempo (ordenar la casa, lavar la ropa, hacer acertijos), pero también está bueno reconocer que hay un problema. Un estado de confusión y de vacío que tenemos que reconocer, aceptar, tolerar lo mejor posible y darnos la posibilidad de soportarnos en esa. No es necesario tampoco llenarnos de actividades para tapar eso, porque en parte transitar la tristeza y desorganización también es necesario para nuestro psiquismo, para poder reorganizarnos de nuevo.

-Hablando en particular de los artistas y la situación inestable en lo económico que implica un momento como este ¿Cuáles crees que son las mejores formas o métodos para no verse sobrepasado por la situación también hablando en un plano mental?

Me parece que lxs artistas en general somos uno de esos grupos particularmente afectados en lo económico por la tragedia, muchos sufrieron cancelaciones de fechas y giras, con la consecuente pérdida de dinero. Genera mucha confusión, enojo y bronca por no poder entender cómo salir de esta, cuánto durará y el temor a que se extienda más de lo pensado. También es cierto y posible que la actividad cultural y nocturna sea lo que más tarde se recupere, lo que genera más frustración aún.

La salida más próxima y espontánea ha sido el streaming, la idea de poder compartir música con otros y otras, y poder expresar la angustia y la soledad estando con los demás por vía virtual. Me parece un recurso sano y genuino, que muestra nuestro espíritu social y gregario. Aunque también, sabemos que es imposible sostener una atención y un público cautivo si hay mil streamings todos los días. Como todo, creo que los que logren hacer streamings piolas, interactivos, de buena calidad y con constancia serán los que logren algo interesante y hasta económicamente redituable en el tiempo.

Creo que, está bueno no perder la organización de la rutina diaria, mantener ciertos esquemas (la vida del artista ya es un poco desorganizada de por sí), hacer música me parece un recurso sublimatorio muy especial y también puede ser un buen momento para desarrollar la creatividad. Intentar hacer algo de actividad física como modo de mover un poco el esqueleto y secretar endorfinas puede ser una práctica muy saludable. Claro, todo en la manera que uno pueda y sienta, también es válido que aquella persona que se sienta un poco más depre e introspectiva se tome ese tiempo para procesar tanta data.

Gonzalo Solimano es uno de los responsables de la productora Unlock, quienes en los primeros días de abril tenían agendada la realización del festival Nano Mutek.

-Tenían en el horizonte un evento muy importante que obviamente fue cancelado ¿Cómo vivieron todo ese proceso particular con el Nano Mutek?

Para MUTEK esta edición en formato Nano en Buenos Aires era clave. La diseñamos enfocada al programa Nocturno porque sentíamos que el público local quería tener esa experiencia con artistas diferentes a los que vienen regularmente a Buenos Aires y nos parecía una buena propuesta previa al programa completo del festival, que hacemos todos los años en septiembre.

Hicimos un gran trabajo de pre-producción, teníamos una curaduría muy interesante y una puesta en escena muy vanguardista con algo totalmente distinto a lo que veníamos produciendo. Habia una gran respuesta y apoyo del público que se manifestó en las redes y en una muy buena preventa de entradas, y como siempre contábamos con el apoyo institucional que caracteriza a esta plataforma.

Fue muy triste tener que suspender el evento, pero lo que estamos atravesando es mucho peor. Lo primero en lo que pensamos cuando se empezó a complicar el asunto fue en el público, los artistas, los que colaboran de una u otra manera y el riesgo de hacer algo así en este momento.

Como productora, en lo único que hoy estamos enfocados es en seguir adelante. Son muy duras las decisiones que hay que tomar en estos momentos, pero el principal objetivo es ganar tiempo y aguantar hasta que se vuelva a activar todo. En nuestro caso la cultura y el entretenimiento.

-Hablando de la situación más en general ¿Hay algo qué se pueda hacer hoy por hoy, ante la incertidumbre que se vive para aplacar las consecuencias que va a traer todo esto en la escena?

Realmente es muy delicado todo y el riesgo de quedar fuera del mercado es altísimo. Hoy, todas las medidas que tomamos están enfocadas en subsistir y de esta forma continuar dando trabajo a la máxima cantidad de personas con las que trabajamos hace años. Tenemos más de 25 empleados fijos y muchísimos freelance: técnicos, diseñadores, artistas, productores, etc. y todo nuestro trabajo se canceló por completo. De todas formas, tengo fe de que, si todos hacemos las cosas bien y cumplimos con la cuarentena, el proceso de desactivar con el virus será mucho más rápido que en otros países. Lamentablemente, la pérdida económica será devastadora para todos, pero antes del dinero siempre están las vidas de las personas y el foco hoy tiene que estar ahí.

Estoy convencido de que esto nos traerá muchas cosas a repensar, el sistema no da para más y hay que cambiar muchas cosas. Estamos en tiempos muy difíciles. Quizás vengan peores, pero luego de este momento de crisis global tendremos grandes oportunidades.

Nuestro más grande deseo es que todo esto pase rápido y la industria vuelva a poder activarse, no solo generamos eventos culturales o grandes momentos de entretenimiento, generamos muchísimas fuentes de trabajo y eso es clave para nuestro país.

Lucas Ferro es un experimentado DJ, acostumbrado a girar con sus discos como modo de vida.